La Recrónica
Semana Santa atípica. Donde otros años ha habido descanso y excursión de vía verde, en esta ha habido fútbol, mucho fútbol.
Todos los equipos debieron saltar al césped a disputar sus encuentros excepto el Veteranos, cuyo partido (amistoso) se suspendió a última hora por problemas del equipo visitante. Lo cierto es que llama la atención que los mayores sean los que tengan más dificultades para comenzar la competición. Por un lado está el hecho de que esta no sea federada. La discriminación que sufren las asociaciones independientes que organizan competiciones deportivas con respecto a las federaciones es un punto que merece un profundo análisis después de lo acontecido con motivo de la presente pandemia. Pero por otro lado está el hecho de que muchos deportistas y equipos de estas categorías han preferido no iniciar su actividad por "precaución". Bien está que cada cual cuide de su salud como estime oportuno. Pero lo que es aplicable a cada individuo particular se entiende menos cuando hablamos de colectivos. Cuando hemos mandado a nuestros hijos a la escuela (cinco horas encerrados en un aula con treinta compañeros), al fútbol, a las extraescolares, a la academia... resulta llamativo que se suspendan actividades análogas para hombres de más de 35 años. Si consideramos el deporte como una actividad esencial deberemos cambiar muchas cosas para que lo sea en la realidad.
El Senior y el Femenino marcan el paso de lo más relevante competitivamente hablando.
El Senior descansó. Dos derrotas seguidas no son un buen presagio para afrontar el momento culminante de la temporada. Hoy mismo los de Marcelo se juegan la clasificación para la segunda fase en Manilva. Allí todo el pueblo y la televisión municipal están volcados con ellos. Aquí... todo el Club está pendiente del equipo.El Femenino triunfó. El jueves cayó en casa frente al Marbella. Faltó acierto en ambas áreas y el equipo marbellí demostró que todo lo invertido en su sección femenina es por algo. Pero nos repusimos y conseguimos cerrar la clasificación para la fase de ascenso el domingo en el Anexo frente al Alhaurín. Un hecho histórico para nuestra entidad. Ahora hay que defender el pabellón ante las mejores. Será un gusto afrontar ese reto. Por cierto que el partido se jugó en parte con luz artificial y el Anexo mostró sus deficiencias una vez más. Tuvimos cuatro focos apagados o lo que es lo mismo, un 25% menos de la iluminación mínima que debiéramos disfrutar. Ya hay voces que reclaman esto fuera de nuestra entidad, pero la lista de deficiencias es enorme. Esto no es ni la "punta del iceberg".