Crónica Alevín A: CP Mijas 3-0 Candor CF
4ª JORNADA 4ª ANDALUZA ALEVÍN G.10
DOMINGO 20 OCTUBRE 2019, PRINCIPAL LAS LAGUNAS.
Alineación: Galisteo; Welland, Hugo, Pablo, Sohail; Samu y Cristian. Alberto, Aitor, Tiago y Sergio.
En el cuarto partido del campeonato llegó uno realmente malo por nuestra parte y ciertamente el primer patinazo real, pues en el resto de encuentros el equipo siempre había dado la cara. Nada hacía presagiar eso, pues el antecedente más cercano era nuestro enfrentamiento con la UD San Pedro de la semana anterior donde estuvimos a buen nivel y que nos servía de extraordinario entrenamiento para enfrentarnos a otro de los "gallitos" del campeonato.
Pero es que encajamos el primero en el 1´ . Zapatazo del dos lagunero, Óliver, al que dejamos disparar plácidamente desde 12 metros, la jugada nos cuesta el 1-0 pero además adelanta lo que será nuestro desempeño defensivo durante la mayor parte del partido.
Sohail juega con problemas con las botas, Wellan se sale lesionado al primer encontronazo... Todavía no lo sabemos, pero estamos fuera del partido y no volveremos a él.
Y ellos tampoco es que lo borden, pero les basta. Casi sin aterrizar ya han colado el primero y se plantan ante los dominios de Galisteo cada vez que quieren. Nuestro banquillo se mueve pronto, Samu y Cristian dejan su sitio a Tiago y Aitor casi antes de haberse enterado de qué va esto. Intentamos enlazar jugadas pero siempre acabamos dando un pase absurdo al contrario, con lo que vamos perdiendo la fe y poco a poco nuestras apariciones en ataque se van reduciendo a los pases desde el marco de Galisteo. Así es muy difícil.
Los locales son más certeros. Llegan con más facilidad y comienzan a gustarse.
Galisteo y sus dos centrales aguantan como pueden, pero están desasistidos, nuestras bandas son dos autopistas laguneras y por el centro hay cola de jugadores blanquillos para disparar desde 12 metros. Con toda la defensa volcada en el sector derecho un centro al segundo palo supone un remate a placer de Eneko que nos clava el segundo.
Lo estamos pasando mal, esto apunta a desastre y todavía caería el 3-0 antes del descanso.
A vestuarios... ¿Habrá reacción visitante en el segundo acto? ¿Machacará el Poli a un rival caído en la lona? Ni lo uno... ni lo otro.
En la segunda el Candor siguió su dinámica derrotista. Nos pesan las piernas a pesar de que la rotación de cambios es constante y no hay soluciones, ni en el campo, ni desde el banquillo. Y cuando nos podíamos temer una debacle los locales se parten en dos, separan líneas y se adhieren el ritmo cansino y pegajoso de los verdones. Hay ocasiones, pero más por errores propios que por méritos del contrario.
Los gestos, los movimientos... el partido está muerto y nadie parece capaz de zarandearlo lo suficiente para que cambie el guión.
El Poli tampoco es que se mate en defensa y cualquier pase de Galisteo hace mella en la zaga local, pero o no acompañamos a Cristian o este no busca los apoyos. Tuvimos opciones de perforar la meta de Raúl pero no lo hicimos.
Y es posible que un acierto en alguna de nuestras ocasiones hubiera podido romper esta pastosa sensación de inoperancia... pero no ocurrió.